martes, 13 de septiembre de 2011

EL VIAJE DE ESTUDIOS A CHIHUAHUA, PARTE 3. LA LLEGADA.

La persona que se sentó a mi lado era Nidia Cárdenas. Ella era el mejor promedio de la escuela, y después seguía Mayra.

A Nidia yo la había visto antes en la secundaria donde yo había estado, y ahí también había sacado el primer lugar de la generación, motivo por el cual en la graduación le dieron un reconocimiento por haber obtenido 10 perfecto en los 3 años que curso la secundaria.

- Nidia: Esta ocupado?

- Diesel: No, no, adelante.

De hecho, alguna vez hable de ella en otro post, sin mencionar su nombre. Fue en el post de los Nerds, que nos unimos contra un profesor que nos trataba muy mal. Nidia era la estudiante que no quería salirse del salón antes de que llegara el profe, como todos nosotros, porque no quería tener una falta. ¬¬


El camión emprendió el camino y mi ilusión o deseo de ver a Mayra subirse de último momento al vehículo no sucedió.

Íbamos saliendo de Juárez cuando Nidia saco su lonche. Una bolsa de pan bimbo con chanwises de… huevo con chorizo???


Ah poco esto comen los Nerds??? Pues no supe, pero la verdad si me dio mucho asco el olorcito, y agradecí mucho a Diosito que no me convidara. Abrí disimuladamente la ventana, puse en mi walkman un casette, si, casette XD de Guns And Roses, y me prepare mentalmente para aguantar el viajecito.

Nada iba como yo lo había planeado. Iba en camino a lo desconocido por una semana, con una nerd al lado comiendo chanwises de huevo con chorizo, y otros compañeros con una grabadora a todo volumen escuchando una canción medio obscena que decía: ”La cabra, la cabra la… voladilla de la cabra, la… voladilla que la parió…” :S No, ps puro éxito instrumental y filarmónico jajaja, y eso que éramos la "creme de la creme" de la intelectualidad de Bachilleres XD


Llegamos a Chihuahua después de 5 horas y media, oliendo a huevo con chorizo, todos mareados, cansados y fastidiados. El camión llego a un gimnasio, que estaba al lado del plante 1 de Bachilleres.

Ahí nos sentaron a todos en las gradas y trajeron a varios chavos y chavas, que nos “escogieron” para irnos con ellos. Ellos eran los anfitriones, estudiantes de bachilleres en Chihuas Capital que, a cambio de puntos o no sé qué, se comprometieron a darnos hospedaje, comida y asesoría sobre a donde ir, en lo referente a los sitios donde se llevarían las competencias.

Me sentía así como en la escuela cuando escogían los integrantes de los equipos y que no quedaba uno luego, luego. Me toco estar ahí al lado del compañero que competiría junto conmigo en el torneo de ajedrez, aquel que me “había dado” el primer lugar en Juárez. Vino un chavo y se lo llevo, me deseó suerte.


En eso vino un maestro con una chava medio bonita, de cabello castaño claro, largo, largo hasta la cintura; de algunos 17 años; tez blanca. Le dijo:

- Entonces señorita, se lo lleva?

- Mmmm pues sí, está bien.


La verdad me sentí como si me estuvieran vendiendo.

Y así, de pronto, ya tenía hospedaje. La chava medio cohibida aun, al igual que yo, no articulaba palabras, solo me decía: Por acá, por allá, vamos para acá. Etc.

Salímos y tomamos una ruta (camión) y le pedí que me permitiera pagar a mí, tanto mi pasaje, como el suyo y el de una amiga que la acompañaba.
Me quisieron dar sus credenciales para que pagar con credencial y les dieran descuento, pero les dije que así estaba bien. (La verdad a mí siempre me dio y me da aun pena pagar con credencial). Ya me dijo que se llamaba María Eugenia, pero le decían Geni, y así le empecé a decir yo también.

Bajamos en el centro de Chihuahua, caminamos por una calle llamada Libertad (ellas le decían “La Liber”). En un puesto callejero de fayuca vi algo que me llamo mucho la atención: una navaja con su estuche de piel. Yo traía dinero que mi papa me acababa de dar para gastos imprevistos, y esta navaja era un gasto imprevisto, así que la compre.


Seguimos caminando y les invite unos tacos, cosa que ellas no querían aceptar, pero de repente me entro el espíritu del “Yo pago”, y así les pague los tacos y luego les pedí que nos detuviéramos en un local de videojuegos, compre fichas y nos las repartí. Salimos al rato para tomar el siguiente camión.

La amiga de Geni se bajó en el trayecto, y ella y yo llegamos por fin a una parada, donde bajamos y caminamos aun algunas cuadras sin pavimentar. Llegamos al frente de una casa de dos pisos. Me presento con sus papas y su hermano, muy buenas gente los 3, y me acompañaron a una especie de pasillo acondicionado como recamara, con una pequeña cama y un buró.

Les pedí me acompañaran a hablar por teléfono a mi casa para avisar que ya había llegado, y aceptaron (Geni y su hermano). Ellos no tenían teléfono, por eso es que salimos abuscar uno público. el cual encontramos unas cuadras después.


Cuando hable me contestó mi papá, y casi inmediatamente me contó:

- Papá: Oye que crees que paso? A que no sabes quién se murió?

La noticia que me dió me dejó en shock :O

Continuará…

lunes, 5 de septiembre de 2011

EL VIAJE DE ESTUDIOS A CHIHUAHUA, PARTE 2. LA ELIMINATORIA.

Fernando Garcidueñas va contra Drago Armani.

En la mother, el primer encuentro que me tocaba jugar era contra mi amigo :S

Ya nos sentamos, saque mi ajedrez de madera con hueso y le di a escoger.


- Blancas, me dijo. No me vayas a ganar rápido eh?

- No, no, échale ganas y veras que estará parejo.

5 minutos después.

- Drago: Jaque Mate :S

- Fer: Que?? Como, no, no, otra vez.

- Drago: Ay Fernando no manches, te hice jaque al pastor, esa es básica.

- Fer: Shhh no les digas nada, otra vez, vamos a acomodarlas de nuevo.

- Drago: Bueno, pero pon mas atención.

- Fer: Si.

4 minutos después.


- Jaque Mate.

- Fer: que? otra vez?

- Drago: Ps no manches, te volví a hacer el jaque al pastor pero con una variante :S

- Fer: Otra vez, ándale, otra y ya.

- Drago: Bueno. La ultima.

Y es que los demás ya estaban terminando sus partidas.

Ahora si tardamos como 20 minutos.

- Drago: Jaque mate.

- Fer: Otra vez! Otra oportunidad.

- Drago: Nah Fernando no manches, ya, nos van a regañar :S

Total que no de muy buena gana acepto y ya le hablamos a los encargados, vinieron, verificaron y me dieron el pase a la siguiente ronda.

Esta vez me toco contra la chava, y con algo de dificultad le pude ganar a los 25 o 30 minutos.

Nuevamente vinieron los encargados y me dieron el pase a la siguiente ronda, donde en caso de ganar pasaba a la final.

Mi siguiente juego era contra uno de los dos participantes que habían ido a representar a la escuela el año anterior. El chavo se llamaba León de la Rosa Hickerson, hijo de un político de Juárez.

Era medio raro. Gordito, vestía de short y playera negra de rock, usaba un Bombin negro, y un walkman que aunque lo tenia puesto en sus oídos, se alcanzaba a escuchar la música de heavy metal a todo lo que daba.


Nos sentamos y yo la verdad estaba muy nervioso, había escuchado comentarios de que era muy bueno.

- León: Te molesta si durante la partida uso mi walkman?

- Diesel: No, no adelante (por mi distráete todo lo que quieras we!), no me molesta.

Se los puso y empezó el juego.

Su estilo de juego era muy agresivo, comiéndome piezas por piezas, es decir, me comía alguna pieza importante, sabiendo de antemano que yo la tenia protegida con otra pieza y que me lo comería.

Decía el maestro que esta es una de las cualidades de los jugadores que saben usar bien las pocas piezas que tienen, por lo que no les importa hacer ataques “kamikaze” desde un principio, por lo que me puse un poco más nervioso.

La partida iba pareja, pero poco a poco me empezaba a acorralar. La opción del enroque ya la había usado, por lo que tenía arrinconado a mi rey, y León se estaba acercando peligrosamente tomando posiciones estratégicas.

Y entonces sucedió. Lo vi nervioso, tarareaba las canciones de su walkman y de pronto empezó a llevar el ritmo de la canción tocando el tablero una y otra vez por un lado.

Me esta queriendo distraer” Esa técnica ya la había usado yo antes, cuando te das cuenta que tienes una jugada que te hará daño o te hará incluso perder, tratas de hacer “Vorlote” o distraer a tu rival preguntándole alguna cosa, golpeando una pieza que ya este fuera del tablero, para distraer la mirada y la atención de tu contrincante.

De pronto lo vi:

Enfrente de su rey estaba una casilla vacía, la cual estaba protegida por un salto de mi caballo, por lo que podría colocar alguna pieza ahí y ésta quedaba automáticamente por el equino. Y esa pieza no podía ser otra que… mi reina!! Que tenia el camino libre para llegar hasta allá!

Analice la situación. Los puristas del ajedrez dicen que si uno dice jaque mate y no es, por honor debemos de tirar al rey (Autodeclarándonos perdedores y abandonando la partida) o que si decíamos jaque, y después de varios segundos, mate, por no estar seguros, tampoco contaba. Teníamos que decir jaque mate, seguido, y que en realidad lo sea.

Vi todas las opciones, no tenia escapatoria. Pero, era León! Era de los mejores jugadores, el que ya había ido antes! Ni hablar, me arriesgue:

Tome la enorme figura que representaba a la compañera del rey. Mis dedos la fueron deslizando hasta la casilla que quedaba libre, enfrente del rey contrario, León dejo de tararear y de golpear con su dedos, clavando sus ojos en mi. Lentamente abrí mis labios y pronuncie las fatídicas palabras que todo jugador no quiere escuchar en los labios de sus adversarios:

- Jaque Mate.

- León: Chin!


Tomo su Bombin y lo aventó al suelo.

- León: Bien jugado.

- Diesel: Gracias, bien jugado tu también.

Le hablamos a los organizadores, que se sorprendieron de que yo hubiera sido el ganador, pues ellos ya conocían a León del año anterior.

Salí con mi amigo Fernando a esperar a que terminara la otra semifinal. Fuimos a tomar agua cuando vi que venia caminando uno de los semifinalistas que había estado jugando todavía, la partida de el había terminado. Se dirigió a nosotros:

- Quien de ustedes es Diesel??

- Yo.

- Felicidades, iremos nosotros dos a Chihuahua a representar a la escuela.

- Ya??? No tenemos que jugar entre nosotros???

- No, no tiene caso, te di el primer lugar, ya vamos a ir los dos, no tiene caso que juguemos.

Y así fue como gane el primer lugar de Bachilleres 5, sin jugar el último partido.

De pronto me di cuenta de lo que pasaba. Iría una semana a representar a mi escuela, aunque ni siquiera había pedido permiso en mi casa ni nada por el estilo. No sabía si estaba listo.

Total que le comente a mis padres, lo cual pareció darles mucho orgullo y claro que me dieron el permiso de ir.


Ese día del viaje, 1 de mayo de 1994, nos citaron en la escuela desde las 6 am. Un camión escolar, de esos amarillos nos esperaba para partir rumbo a la ciudad de Chihuahua.

El corazón me latía aprisa. Primero porque era un viaje a lo desconocido, lejos de mi familia una semana, de la cual muy pocas veces, si no es que nunca, me había separado.

La otra razón, es porque quizás de un momento a otro llegaría Mayra Rodríguez, la chica de la cual, como comente en el capitulo anterior, estaba locamente enamorado, y que era muy probable que fuera para representar a la escuela en alguna materia, ya que les recuerdo, era muy aplicada y el mejor promedio de la escuela.

(Foto de Tifanny Amber-Thiessen, una artista norteamericana muy parecida a Mayra en ese entonces).

Subí al autobús, me despedí de mis padres, y me pegue al asiento de la ventana, más o menos a la mitad del autobús.

Quedaba un asiento libre a mi lado, el cual para mi sorpresa y asombro, fue ocupado por…

Continuará…