lunes, 30 de noviembre de 2009

UN COMPAÑERO ESPECIAL.

Y ahí estaba yo, a mitad de la noche. La temperatura descendía, lo podía notar por las bocanadas de "humo" que salian de mi nariz y boca al exhalar.

Al mirar las lamparas de luces tenues que desafiaban la noche, puedo observar gotas de lluvia mezcladas con pequeños cristales de hielo que caían como ráfaga sobre el asfalto del puente internacional. El cielo entre oscuro y rojizo presagiaba una tormenta de nieve que nunca llegaría, sino hasta algunas horas despues.



Mis pantalones de mezclilla rotos contrastan con la imagen que tenía hace algunas semanas todavía. La informalidad se apoderó de mi y llego sin darme yo cuenta de ello. La bufanda que nunca pense traer, es prueba de ello, sus extremidades se ondean al vaiven del viento.

Mi silueta, recargada en un soporte de concreto que levanta a la enorme estructura metálica que sirve de puerta de entrada a una tierra llena de oportunidades, de temores, de contrastes; sostiene es su mano a un compañero fiel que ha estado conmigo a traves de los años, y en ésta últimos meses no se ha separado ningun dia de mí.

Su tacto es tibio, su aroma es penetrante, al contacto con mis labios absorbo ese sabor inconfundible que solo Él tiene.

Desde pequeño lo he conocido, siempre ha estado ligado a mi vida, en los momentos buenos, en los malos y en los peores. Siempre paciente. Sabe que tarde o temprano tendre que tomarlo entre mis manos y que se fundirá en mi como solo Él lo sabe hacer, dándome su aroma, su sabor y su calor.

Bebo otro sorbo de mi vaso desechable de café, y ese exquisito sabor de granos selectos cultivados en altas latitudes donde el clima y la presión convergen en la creación de tan exquisito y aromatico fruto, inunda mi ser y me saca de mi letargo.



Ya es muy tarde, las gotas de agua nieve siguen cayendo copiosamente sobre el gigante sobre el que estoy parado. Mi humanidad es alcanzada por la pertinaz lluvia, pero nada me importa, mientras mi amigo descanse en mi mano y juntos le hagamos la guerra a las inclemencias del tiempo y al letargo que me ocasiona no dormir por las noches.

Y ahí estamos los dos, solos como muchas veces, desafiando la penumbra de la noche y lo imposible del clima, sintiendonos más vivos que nunca, dándole sorbos yo a Él, y Él junto conmigo, dándole sorbos a un pasado que ya no volverá, y a un futuro incierto que aparece segundo a segundo...


Hasta tiempo de crearle una historia me dió:



San Pedro, el ayudante de Dios llega con Él preocupado.

- San Pedro: Señor, tenemos problemas.

- Dios: Dime, que pasa?

- San Pedro: Desde que la serpiente les dió de comer del árbol del conocimiento a los hombres, sus problemas empezaron. Tienen conocimeinto, es cierto, pero con este conocimiento vienen derechos y obligaciones, tienen problemas, tienen temores, incertidumbres, nerviosismo, en fin, que ha empezado un caos.

Dios en su inmensa sabiduría meditó y por fin le dijo a San Pedro:

- Dios: Pues sí, se nos paso la mano con lo de la serpiente y la manzana, no era para tanto.

- San Pedro: Y que haremos señor?

- Dios: Ve por la serpiente de nuevo. Dile que ahora les enseñe a los hombres ese otro fruto prohibido que ayuda a relajar, que da lucidez, que echa a volar la mente, con el que un puñado de hombres se reuniran a componer el mundo, con el que el más débil al probarlo sera el más fuerte, y cuyas mentes acabadas volveran a tener lucidez.

- San Pedro: Pero que buena idea señor, enseguida!

Salía el ayudante a cumplir el especial encargo cuando...

- Dios: Espera, como es que llamamos ese a fruto milagroso??

- San Pedro: Café, señor, le pusimos por nombre café...



Saludos.

domingo, 22 de noviembre de 2009

ORGULLO.

El día de ayer lleve a mi hija a una fiesta infantil en casa de una amiguita de la escuela.

El día de hoy al ver los dulces que le habían dado en dicha fiesta, me llamó la atención un "pulparindo" edición extra salada y extra picante.



- Diesel: Este para mi, si? Al cabo que esta bien picoso, no te va a gustar.

- Diana: Pero si me va a gustar, ademas no creo que pique tanto.

- Diesel: Andale, dámelo, andale, di que si no seas cobarde, si??!

- Diana: Bueno, agarra la mitad y yo la otra mitad.

- Diesel: No, dámelo completo! Te va a picar.

- Diana: Bueno, a ver, dame un pedacito y si me pica te lo quedas completo.

Corte un pedacito de una esquina de la tablilla del dulce de tamarindo y se lo dí.

Apenas lo había ingresado a su boca cuando en su cara se puso una expresión de dolor y salió corriendo al refrigerador a tomar un gatorade rojo que empezo a beber como desesperdada.



- Diana: Quedatelo!

Feliz y contento me comí el dulce completo.

Al rato, entre a la habitación donde estaba mi esposa y mi hija y sin que ellas me vieran escuche lo siguiente:

- Esposa: Diana, pero que raro, la otra vez no te pico el dulce ese, ya te había comprado uno.

- Diana: (en voz baja) Ssssshh ya se, pero mi papa lo quería más que yo...


Mi hija no sera de muchos dieces en la escuela, no aparece seguido en el cuadro de honor, pero con acciones como ésta se que será una gran persona en la vida, y eso no se compra con nada en el mundo, y me hace sentir lleno de orgullo...



Saludos.

domingo, 1 de noviembre de 2009

AMOR PLATÓNICO.

Quien no ha tenido amores platónicos? Me pregunto. Yo si, y muchos. Pero quienes de nosotros hemos sido amores platónicos de alguien? Ahí la cosa cambia verdad?

Pues yo, que reconozco que soy mas feo que pegarle a Diosito por la espalda jajaja, tuve una vez a una chava de la que supe, yo era su amor platónico, y es una historia que a continuación narraré, me acompañan?

Como comenté en el parrafo anterior, mi belleza es una belleza interna jajaja, lo malo es que ni modo de voltearme la piel y andar con los organos de fuera (sin albur jajaja). Estoy seguro que si un día me operaran del apéndice, o un riñón, o el higado el médico diría: Hablenle a los estudiantes para que vengan a ver, miren nadamas que vesícula biliar tan bonita! Y el bazo y los intestinos ni se digan!



Es que tu eres bien buena gente, bien noble. Me dicen todas. Pues bueno. Al menos esa nobleza y bondad me han "servido" para andar con chavas la verdad muy bonitas, que no se que me ven, si la bondad o mis zapatos, porque si calzo grande y vivo lejos, ah no verdad? jajajaja



Pues les digo, este es el preámbulo para la historia que quiero contarles.

Corría el año de 1994 en bachilleres 5.

Estaba en el grupo de capacitación para fisico-matemático. Cierto día en la clase, algo me tenía intranquilo. Me sentía observado.

- Otra vez mi delirio de persecución, pense, la terapia con el psicólogo no está funcionando jajaja.

Empece a buscar desde un extremo a otro extremo del salón, y de ahí me vine "escaneando" cada compañero, a ver quien era el que me veía. Ya casi para terminar de buscar, a dos filas de mi banca estaba una compañera llamada Sarah Brightman* (*No se si se dieron cuenta, pero el nombre fue cambiado para protejer la indentidad de la susodicha :P), una compañera de pelo castaño, complexión regular, y ojos cafes que en ese momento tenía dirigidos hacia mí.



Con mi cabecita le hice una seña así como de: Que onda? Que se te perdió? Soy o me parezco?? :S

Pero fué inútil, su cara de Doña Florinda al ver al Profesor Jirafales no movió ni un músculo facial y seguía observándome.



- Diesel: Eh we, que onda? - le dije a un amigo mientras le señalaba a la susodicha - Que tanto me ve?

Mi amigo se agacho y se interpuso entre la mirada de Sarah y entre mi. Se le quedo viendo a ella primero y luego, aún así agachado, giró para voltearme a ver a mí, para despues dar su veredícto final.

- La traes muerta.

- Diesel: ukela canción.

Yo por mi parte, pues no tenía planes de nada con nadie. Asi que me hice el occiso y seguí con mi vida normal.

Un dia en clase de dibujo industrial, vino hasta donde estaba yo para pedirme que le ayudara con una lámina de dibujo.

- Diesel: Ah claro que sí vamos.

Fuímos a su lugar y ahí me tienen explicándole a un ladito.

- Mira los trazos son aquí, acá y acá. Colocas las escuadras de esta forma y ya luego nadamas las deslizas así y asa, te recomiendo que les pegues unas monedas de 10 centavos abajito de las escuadras para que no se te manche como aquí, pues de ésta forma las escuadras llenas de carbón del lápiz no toca tu lámina porque se hace un espacio entre la escuadra y la lámi....



Pero no. Me eché mi superdiscurso de okis, ps no me estaba poniendo atención a la lámina, sino que me sonreía y tenía cara de borrego a medio morir, como diría el Chavo del 8.



Con el tiempo me gradue de Bachilleres. Entré a estudiar Ingeniero Industrial en el Tecnológico de Ciudad Juárez, y un día, andando por los pasillos, sentí la misma mirada que muchos meses antes. Voltee hacia arriba y ahi estaba Sarah, observandome con su característica cara de doña Florinda jajaja. La ví algunas veces por los pasillos de ese primer y único semestre que curse en el Tecnólogico de Juárez, antes de cambiarme a odontologia, y posteriormente a medicina.

Pero aun la recuerdo, no con amor, porque nunca se dió nada mas, pero si con cariño y la gratitud de decir que no se que me vió, pero se le agradece que me subiera el ánimo un poquito.



(Claro que por supuesto que desde luego que este we no soy yo! jajaja)

Saludos!